Primera mañana de Otoño, un día nublado y con algunas gotas de lluvia. Decidí conocer la Granja M. Viader y fui muy feliz trás mi elección, pues me sentí como si hubiera entrado en un túnel del tiempo: mesas de mármol con sus antiguas y pesadas patas de hierro, los colores de las baldosas que adornan el suelo, las fotos familiares y los carteles antiguos, el ruido de las charlas y el olor a chocolate con churros me transportaron hacia mucho años atrás.
1870 fue el año en el que empezó a funcionar la Granja, pero fue en 1904 cuando un joven llamado Marc Viader Bas se hace cargo del negocio. En el año 1910 pasa a ser de su propiedad y lo registra con el nombre de Granja M. Viader – Cardedeu, que se conserva hasta hoy. Empieza un negocio familiar.
El señor Marc tenía claro que la clave del éxito estaba en la calidad y diversificación de sus productos, fue un innovador. Involucró a sus hijos en el negocio familiar, y así llevaron a cabo varios proyectos, como el de higienizar la leche. Viajó por Europa, ganó premios y en 1931 presentó su producto estrella: El Cacaolat.
Hoy en día la granja está en manos de la quinta generación de la familia Viader. Sin duda un lugar especial.
Foto extraída de aquí
Me senté en una de sus mesas e imaginé que allí un día también se sentó Pablo Picasso u otra personalidad con su taza de café o chocolate. Pedí mi café con leche, tostadas y tarta de manzana y de cuando en cuando cerraba los ojos y me sentía un poco en épocas lejanas. Al abrir los ojos veía a los frecuentadores de siempre, personas que forman parte de la historia de la Granja, con su periódico en mano y un aire de relajación. También vi a turistas y personas de la ciudad, que como yo, también entraban allí por primera vez. Gente con una mirada curiosa y encantada.
El movimiento en este lugar es intenso, hay personas que entran para un café rápido, las que pasan un buen rato disfrutando de los muchos sabores que hay en la Granja, y algunos que se acercan a comprar algún queso, embutido o mermelada.
Sobre la carta de la Granja M.Viader, lo que tengo que decir es que es extensa: cafés, tés, chocolates, bocadillos fríos y calientes, tartas, melindros, churros, etc, etc. Todo hecho allí mismo en su obrador, productos de calidad y sabor. Además encontrarás productos aptos para los celiacos.
Si te gusta la Barcelona antigua, la historia, un lugar para estar y sentir, no puedes dejar de ir a la Granja M. Viader. Hay que visitarla, volver y volver. Hay que conocer sus productos y comprender el legado del señor Marc Viader.
La historia completa, con todos los detalles, y muchas informaciones más, podrás encontrarla en su página web
Calle Xuclà,6
Horario: 09:00 – 13:15 y 17:00 – 21:15
(Lunes a Sábado)
Domingo y Festivos cerrados